Los siete directivos de la Cooperativa de Ahorros y Crédito Herrera (Coop-Herrera) están acusados de cometer un fraude de unos RD$2,500 millones a través de la falsificación de documentos, robo de identidad, entre otros delitos.
Eligio Méndez comenzó a posicionar en puestos administrativos de la cooperativa a familiares y personas de confianza, que le permitían manejar los fondos de los socios como si fuesen “un patrimonio propio”.
Méndez designó a Ana Cecilia Tejada Santos, como gerente de oficina principal desde el año 2017, a Julio César Minaya Mejía, como auditor interno desde el año 2018; a Jacer Eliazar Mejía Pereyra, como encargado del departamento de crédito desde el 2015, este último sin contar con los conocimientos ni preparación necesaria para desempeñar esa posición.
El documento señala que los encartados utilizaron documentos falsos como garantías y se hicieron beneficiarios de préstamos millonarios los cuales no fueron pagados, sino que ese dinero fue sustraído de los fondos de los ahorrantes de la cooperativa.
Según establece el documento, los imputados creaban créditos falsos que luego se desembolsaban en las cuentas de otros socios que participaban en la estructura criminal; con estos simulaban la apertura de certificados financieros a plazos (sin respaldo económico), que generaban intereses que eran retirados en efectivo o usados para pagar las nóminas de las empresas que participaban en la red.
Los acusados adquirieron bienes suntuosos como villas, vehículos alta gama, yates, entre otros y utilizaron como método de pago los certificados financieros sin garantía o respaldo colateral. Esto generaba intereses mensuales que eran retirados por los vendedores, cuyo dinero salía de los socios de la cooperativa.
El órgano persecutor establece que los bienes
adquiridos con el dinero de los socios eran colocados a nombre de empresas y de
terceras personas, cercanas a los miembros de la estructura criminal.
Entre otros delitos que cometieron Eligio Méndez y los
demás encartados, está la falsificación de certificados de depósitos a plazo
fijo con el que reflejaban una liquidación ficticia, constituyendo una
falsificación de valores o títulos.
También, alteraban los estados financieros de la
cooperativa para reflejar una liquidez aparente y de esta forma poder seguir
atrayendo socios e inversiones, y asegurarse de que se continuaran las
operaciones delictuales.
De igual forma, los miembros de la estructura
alteraron los sistemas con la incorporación de datos falsos y hacían parecer que
las cuentas de ahorro de determinados socios habían recibido cantidades de
dinero por caja, el cual nunca ingresaba a las cuentas de la cooperativa ni a
la bóveda.
El Ministerio Público indicó que fue disuelto desde
inicio del año 2020 por el Consejo de Administración, el comité de crédito
luego de haber rechazado la autorización de préstamo para uno de los socios
miembros de la red acusada, debido a que garantía presentada no era idónea, no
obstante, se libraban actas con firmas escaneadas de los miembros.
Según afirma el documento acusatorio, con el fin de
blanquear los capitales y bienes adquiridos, la red criminal diversificó
distintas actividades económicas al adquirir programas de radio, agencias de
viajes y negociaron la adquisición de acciones en múltiples bancos.
APLAZADO
El juez Máximo Castelar Roa Saint Hilaire, del Juzgado
de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste, aplazó para el próximo lunes 16
al mediodía, el conocimiento de medida de coerción en contra de los siete
directivos de la Cooperativa de Ahorros y Crédito Herrera (Coop-Herrera).