Grupos de manifestantes con banderas rojas de los dos principales sindicatos, UGT y CCOO, se reunieron para manifestarse por la Gran Vía y Alcalá, dos de las grandes arterias de la capital, bloqueando la circulación.
"Así, así. Ni un paso atrás con la reforma. Huelga general", corearon los manifestantes, algunos de los cuales llevaban pegatinas con el lema "No a la reforma laboral del despido barato". Varias calles fueron cortadas al tráfico al paso de los manifestantes que circulaban por el centro de Madrid, seguidos por la policía que ha ocupado la Puerta del Sol, en el corazón de la capital, donde está previsto que termine por la tarde la gran manifestación final.
"No estamos seguros de tener trabajo. Con la reforma laboral, mañana nos pueden despedir, pueden hacer lo que los empresarios quieran, también a los funcionarios", afirma Víctor Mallenco, de 34 años, que trabaja en una universidad de Madrid.
"Queremos que el gobierno se replantee su actitud y que se respeten los acuerdos que los sindicatos y la patronal han conseguido", afirma Virginia Fernández, de 42 años, representante de UGT en el sector de la educación.
"Su actitud (del gobierno) ha sido absolutamente déspota. Antes de las elecciones en ningún momento ha dicho que iba a tomar estas medidas, que no se justifican por la crisis. No van a mejorar el empleo ni la economía", añadió.
España vive este jueves una huelga general de 24 horas contra la reforma del mercado de trabajo y las medidas de austeridad aplicadas por el gobierno de derechas, que alimentan el malestar social frente al desempleo y la recesión.