POR FELIX BETANCES
El Presidente
de la República Dominicana Lic. Danilo Medina Sánchez, hasta lo que
conocemos, es una persona con características personales muy especiales, y como
todos sabemos, desde su campaña electoral, en varias ocasiones manifestó, que
se había preparado para gobernar.
De hecho, creemos que El sabía muy bien qué
tipo de País o sea, que conocía las gentes iba a gobernar, aunque habría que
preguntarse, si alguna vez pensó que tendría que hacerlo ejerciendo un gobierno
a medias, es decir, un gobierno compartido en forma desventajosa, con
funcionarios y personas quemadas y desprestigiadas políticamente hablando,
ubicadas en posiciones señeras, de las cuales no ha podido desprenderse y a las
cuales tampoco puede torcer sus muñecas.
Entre esas personas incluso hay algunas que
han tenido la tozudez de declarar sus aspiraciones presidenciales, desde los
cargos o posiciones que ocupan, sin renunciar a ellos, lo que los coloca ante
el pueblo llano, sencillamente como “imprudentes”.
Cuando uno escucha al Ministro de
Planificación y Desarrollo del País, Ing. Temistocles Montás, quien es uno del
mencionado grupo, decir que no habrá un aumento general de salarios para los y
las servidores públicos, en medio del anuncio de un Presupuesto Nacional para
el año venidero que ascenderá nada más y nada menos que a más de 600 mil
millones de pesos; es como para preguntarle al viento: ¿Qué le estará pasando
al Presidente Medina?.
Después de que el anterior presidente Dr.
Leonel Fernández dio muestras de menosprecio a este tan importante y necesitado
sector de la población, donde se encuentran los más abnegados servidores del
Estado, negándole por cuatro años el derecho de siquiera poder satisfacer
mínimamente, sus acentuadas carencias, y de haber pasado un año del gobierno del Lic. Medina, no es para que
ahora se salga con esa desafortunada noticia.
El sector público de nuestro País, ha sido lo
suficientemente paciente, para esperar que se cumpla una promesa que fuera
hecha por el propio gobierno, en el sentido de que a partir del próximo año
2014, habría un sustancial aumento de sueldos a los servidores públicos al
igual que a los pensionados los cuales en más de un 90 por ciento, perciben
ingresos de miseria, tal y como el propio Presidente lo reconoció en su
discurso del 27 de febrero pasado ante las Cámaras Legislativas.
Aquí siempre se ha alegado que los aumentos
de salarios son inflacionarios, porque incrementan los precios, pero esas no
son más que falsas razones, de algunos cabezones a los que solo les interesa su
propio bienestar.
En cinco años que el sector público no recibe
un alza salarial, en cuánto no se ha disparado el costo de la canasta
familiar?. Hay varios sectores sin embargo, que sí han sido favorecidos en
forma indiscriminada y qué decir de los funcionarios que a su antojo también
han hecho lo que les ha venido en ganas?.
Señor Presidente, no se deje manejar o
convencer por ese grupo de malos Asesores que le rodean, entre los que están
los peores enemigos de su gobierno y de su propia gestión y que no escatimarán
esfuerzo alguno por ver el fracaso suyo ya que entre ellos, por si usted no lo
sabe, se preparan para ir cerrándole el paso a su buena gestión, porque sienten el temor de que esto pueda
entorpecerles sus marcadas aspiraciones de justificar y de volver a lo malo.
Cumplir con la palabra empeñada y atender con
prudencia a los sectores sociales más carenciados en nuestro País, también es
algo que nunca se ha hecho.
Es imperativo un aumento de salarios a partir
del año 2014 a todos los servidores públicos y pensionados, señor Presidente.
Es usted el conductor; no se deje conducir.
La palabra del Señor Presidente, “en entredicho”.
Reviewed by Emma Pérez
on
septiembre 30, 2013
Rating: