Se suma a larga lista de mujeres asesinadas por sus maridos .

Benny Rodríguez/ La Lupa del Sur

 BARAHONA.- La joven Daniela Pérez, de 24 años, se sumó bien temprano en la mañana de este lunes a la larga lista de mujeres que son víctimas de asesinato por parte de sus respectivos maridos al resultar impactada de un disparo en la mandíbula derecha por parte de su pareja, en un hecho registrado en su vivienda del sector de Blanquizales 

La joven mujer que deja huérfanos a dos hijos con edades que oscilan entre un año y 8 meses y nueve meses de nacidos, procreado con su marido, identificado solo como Richi, fue llevada por este, un médico no identificado y vecinos bañada en sangre a la emergencia de la clínica Magnolia de aquí.

Richi, luego de llevar a su pareja al referido centro médico, salió del lugar sin rumbo desconocido y hasta el momento se desconoce si ha sido arrestado por la policía o el Ministerio Público que se presentaron al lugar y salieron a buscar las evidencias del caso.

Una enfermera que recibió junto a los médicos a la joven, dijo alalupadelsur, a cambio de que no reveláramos su identidad, porque no está autorizada a ofrecer información, confió que la joven madre de dos hijos pequeños llegó muerta a ese centro privado de salud.

El doctor Miguel García Ortiz, médico legista de esta provincia, un fiscal adjunto, miembros de Investigaciones Criminales y de Homicidios de la Dirección Regional Sur de la Policía Nacional se presentaron a la clínica Magnolia a indagar sobre el hecho de sangre.

Pasadas las ocho de la mañana el legista García Ortiz no había examinado el cadáver de la asesinada, pero confió que el cuerpo sin vida sería trasladado a la Regional del Instituto Nacional de Ciencias Forense, con asiento en Azua a practicarle una autopsia para determinar las reales circunstancias de su deceso.

Israel Pérez García, tío de la joven asesinada por su pareja, dijo que el caso ha consternado a la comunidad de La Hoya, de donde era oriunda la fallecida.

Pérez García, dijo esperar que tanto la fiscalía como la policía investiguen bien el asesinato de su sobrina, ya que dijo que su marido le halaba a menudo la pistola que portaba con permiso oficial, con la que finalmente le quitó la vida a su pariente.

A la clínica Magnolia, ubicada en la calle Uruguay, próximo a la avenida Luperón se presentaron decenas de personas, amigos y familiares de la fallecida provenientes de la comunidad de La Hoya, de donde era nativa la occisa, así como decenas de curiosos, quienes lamentaban la tragedia.